El uso de cera de polietileno en la producción de cintas adhesivas es fundamental para lograr un rendimiento óptimo. Como agente antideslizante y antibloqueo, minimiza la fricción entre las capas adhesivas, lo que permite un desenrollado suave de la cinta. Esta funcionalidad es especialmente crítica en los sectores de embalaje industrial y de consumo, donde la aplicación y el desenrollado de cinta sin costuras son vitales para la comodidad del usuario y la eficiencia operativa.